15 de marzo de 2007

Reflexión agónica

Estoy en la cama, tengo los ojos abiertos, observo dentelladas de luz en mi retina, me he acostado con un dolor de cabeza que no me deja pensar, oigo un clak, clak, clak, es mi cerebro, lo siento como una pasta compacta y sin vida que sigue el compás descompasado de un corazón podrido, estoy hecho polvo. Intento dormir pero el dolor es muy grande, estoy hueco por dentro, no corre sangre por mis venas, tan solo un líquido negro y espeso, mi cuerpo ya no quiere regenerar, ha decidido después de muchos avisos que antes de morir debo sufrir por el maltrato al que le he sometido durante todos estos años. Me siento ansioso y asustado, mis huesos empiezan a doblarse como una cerilla que se consume.
Cierro los ojos, con fuerza, intento dominar la situación pero ya no puedo, estoy totalmente hecho un verdadero asco, pienso en Dios y pido con las pocas fuerzas que me quedan que alguien me de muerte de una vez, ese seria el mejor milagro. Mientras tanto mis brazos y piernas se han dormido, no los siento, no quieren responder, si me tirasen del brazo estoy seguro que se separaría del cuerpo. Cojo aire ya desesperado, todo el que puedo, e intento llevar las pocas fuerzas que me quedan a una mano que vagamente quiere despertar, flácida, entumecida y totalmente amorfa, no puedo mas, quiero que el dolor acabe. Me llevo la mano a la cara para llorar de dolor, ni siquiera sale una lagrima estoy seco, solamente siento el descanso de haber llorado. Afuera un perro ladra, sufro un espasmo que lanza al aire mis extremidades, si voy a morir ¿porque no hoy?, ¿Porque no ya?, la única esperanza que tengo es que explote el butano o que el piso se venga abajo, hace poco pensé en el suicidio pero no lo veo bien, solo seria un empujoncito, pero no tengo ni valor ni fuerzas para hacerlo, me engaño pensando que tal vez esta agonía pueda servir para que alguien se replantee su forma de vivir. Elegí alguna vez una muerte solitaria, no lo creo.

1 comentario:

Achiperre dijo...

Maravilloso, nunca puedo parar de leer ...